jueves, enero 18, 2007

La Era del Hielo


Para todos los que nacimos y vivimos la mayor parte de nuestra vida en el hemisferio sur, Enero se relaciona con verano, sol, piscina, playa, lago y muuucho calor. Todos sabemos que en la otra parte del mundo, en el hemisferio norte, en esta época del año es invierno. Pero ese conocimiento es teórico, en realidad, no hemos experimentado el invierno en las latitudes boreales en carne propia.

Les voy a relatar mi historia de la semana que recién pasó. Sin exagerar. Las últimas dos semanas había estado particularmente caluroso, llegando en algunos días a los 15 grados (el record histórico es de 20 grados para Enero). Había nevado sólo un par de días, cosa rara para esta zona que promedia en Enero temperaturas de 1 y 9 ¡BAJO CERO! Yo por supuesto no me quejaba: por más abrigado que estés, cuando la sensación térmica es de -24° igual a uno le da frío.

Bueno, continuando con la historia, este martes amaneció muy nevado, quizás ni tanto para la zona, pero para mí, que no había pasado un invierno acá, estaba bien nevado. El fin de semana había estado lloviendo, con harto frío, pero no el suficiente para que caiga nieve. La cosa es que cuando me quise subir al auto esa mañana tuve un problemita... La cerradura estaba congelada y no podía abrir la puerta. Sí, tal como escuchan, hacía tanto frío que el agua que había caído en la noche se congeló ¡¡¡adentro de la cerradura del auto!!! La cosa es que yo andaba con ropa de trabajo, así que mi maravilloso macho me ayudó y trajo un par de botellas de agua caliente para tratar de abrir la puerta. Cuento corto, entramos por la puerta del pasajero dejando un laaargo rastro de nieve en el auto.

Hasta acá la cosa pasa piola, sin embargo la nieve que había caido dentro del auto, varias veces porque salimos como tres veces en el día, se derritió con la calefacción y se evaporó dentro del auto. Estoy segura de que a alguno de Uds. les ha pasado que cuando se suben al auto está completamente empañado. Bueno, acá pasa algo un poco diferente, como hacen -20° afuera, y la temperatura no sube de -10°, el agua en vez de condensarse, ¡¡se congela!!. Tal como lo escucha, aparte de los 20 cm. de nieve arriba del auto, ayer en la mañana tenía una capa de hielo por dentro del auto.

Por último y aunque parece de ficción, luego de sacar la nieve de encima del auto, sacar el hielo de adentro del auto con la calefacción, hay que lidiar con otro problemita surrealista. En Chile cuando uno le echa aguita con el sapito al vidrio delantero queda mojadito, pero finalmente se evapora el agua y el vidrio queda reluciente. Acá uno le echa aguita con el sapito y en vez de quedar mojado y evaporarse se ¡¡¡congela!!!. Tal cual. Uno alcanza a ver como el agüita se congela. Y eso que compramos agua para limpiaparabrisas que se supone no se congela.

Creo que el calentamiento global tiene efectos desconocidos... ¿La próxima Era del Hielo? Parece que será más pronto que lo que esperábamos...

martes, enero 16, 2007

Estimados, ¡¡¡llegamos a las mil visitas!!! Así es, gracias al contínuo esfuerzo de cada uno de Uds. ¡lo logramos! Hicimos de este blog, un blog bien leído...

Para los que no saben, en la parte inferior del blog hay un contador, que nos dice cuántas visitas han habido hasta el momento. Lo más importante es que este contador sólo cuenta las visitas hechas por diferentes personas en un mismo día. Así es que no cuenta si es que Uds. se conectaron dos veces en un mismo día.

¡Muchas gracias a todos por su fidelidad!...

No se preocupen, ¡quedan temas para rato!

Me despido con un cordial abrazo,

Gaby @ Ithaca

domingo, enero 14, 2007

Se Lo Ganó... Se Lleva el Premio... Está Contento, Se Lo Ganó, ¡Ganó!


Debo reconocer que he llegado bajo para escuchar a gente hablando en español. Algo así como para refrescar la mente de estar pensando todo el santo día y dejarla pensar en lo que ella quiera. Al fin de cuentas, mi pobre cerebrito ya no habla ningún solo idioma bien (no sé si alguna vez lo ha hecho), es cosa que le pregunten al Dani no más.

La cosa es que descubrí hace poco que tenemos en el cable Univisión para Syracuse e Ithaca (no es la misma Univisión de Miami, es la versión especial para las 400.000 personas de la zona, que incluyen un par de latinos más además de nosotros). Sí, así es, el canal donde transmiten nuestro tan nacional Sábados Gigantes. La cosa es que ayer entre dos capítulos de 24 (estábamos haciendo una maratón para alcanzar a ver la nueva temporada que empieza hoy) vimos por unos minutos a don Francis (la versión para los Estados Juntos obviamente).

Voy a empezar por reconocer que el único que habla algo de chileno en el programa es Don Francisco. El resto, todos incluyen aire cuando pronuncian la letra "J" (i.e. trahimos). Con eso en mente les quiero relatar nuestra experiencia.

En una de las secciones del programa, Don Francisco se junta a conversar con un caballero, cuya historia era la siguiente. Este caballero era Colombiano, hace como 12 años tenía por novia a una hóven en Colombia, su familia no lo aceptaba pues creían que sus "intenciones para con ella no eran buenas". Esta hóven quedó embarazada, el creía que era su bebé, pero ella con sus contínuos "éhs tu bebé, no éhs tu bebé", nunca lo reconoció como su padre. El cabayero se vino a vivir a los Estados Huntos, se casó y tuvo un hiho. Y ahora está en el programa pidiéndole a Don Francisco saber si es que él es el padre de esa hiha, que hoy tiene 12 años.

La imahen es la siguiente. Luego de relatar la historia, Don Francisco muestra un video de la niña en Baranquiya, donde eya comenta que hablan por chat y por teléfono. En el programa aparece un cabayero vestido de doctor con un sobre. El doctor explica que le hicieron un examen de paternidad a la niña y explica qué significa cada posible resultado. Luego, después de una música de suspenso, el doctor dice que "con un 99% de probabilidad, él es su padre". Y todos felices... Suena una música alegre y básicamente cantan: "se lo ganó... se lleva el premio... está contento, se lo ganó, ¡ganó!".

La cosa es que hace un par de semanas, ví la misma sección un par de minutos. En esa oportunidad el doctor dijo: "Usted no es el padre"... ¡Y la misma música sonó! Del estilo "Taratarararara, ¡Mazal Tov!". Y, por supuesto, todos felices otra vez. Igual macabro, ¿o no?